Cepillo alisador. Ventajas y recomendaciones
Cepillo alisador. Ventajas y recomendaciones. Si estás buscando comprar un cepillo alisador esta es tu guía. Aquí te ofrecemos los mejores cepillos alisadores de todo tipo, también te enseñamos cómo elegirlo, cómo funciona y sus características.
¿Cómo funciona un cepillo alisador?
Un cepillo alisador sencillo es muy fácil de usar, solo tienes que enchufarlo a la corriente eléctrica, seleccionar la temperatura deseada y esperar a que se caliente. Una vez que esté lo suficientemente caliente, podrás peinar tu cabello como lo haces con un cepillo normal con cuidado de no tocar el cuero cabelludo.
Como cada pelo es diferente, la temperatura de uso dependerá del tipo de pelo que tengas, así que lo mejor es que pruebes por ti misma subiendo la temperatura poco a poco hasta que veas qué temperatura te ofrece los mejores resultados de alisado.
No obstante, como norma general, si tienes el pelo fino se recomienda una temperatura aproximada de 170 – 200 ºC mientras que si tienes el pelo normal la temperatura óptima sería de 190-210 ºC. En cambio, si tienes el pelo grueso o muy grueso probablemente tendrás que utilizarlo a temperatura máxima para obtener resultados profesionales dignos de la mejor peluquería.
¿Qué diferencia hay entre un cepillo alisador y una plancha de pelo?
La principal diferencia es que el cepillo alisador es más fácil de utilizar. Para alisar el pelo solo es necesario elegir la temperatura adecuada en función del tipo de pelo y peinar el pelo por mechones y, por lo general, con tan solo unas pasadas ya notaremos cómo el pelo está bastante más liso. En cambio, las planchas son más difíciles de coger y más peligrosas ya que es más fácil quemarse con ellas que con un cepillo alisador.
Por otra parte, el cepillo alisador es perfecto para todas aquellas mujeres que no pueden dedicar mucho tiempo al pelo. Si bien es cierto que las planchas de pelo son más efectivas y que su alisado es más profesional, también es verdad que alisar una melena larga puede llevar fácilmente 45 minutos, mientras que con un cepillo alisador se puede conseguir una melena alisada y con brillo en menos de 20 minutos.
¿Cómo elegir tu cepillo alisador eléctrico?
Aquí van algunos factores que convienen tener muy en cuenta a la hora de comprar un cepillo alisador:
Temperatura máxima
La mayoría de cepillos alisadores cuentan con 3 niveles de temperatura para distintos tipos de cabello.
- Por un lado, para el pelo fino, entre 170º y 190º.
- Por otro lado, para el pelo normal, entre 190º y 210º.
- Y, por último, para el pelo grueso, desde 210º a 230º.
Apagado automático
El apagado automático creo que es una de las mejores funciones en este tipo de cepillos.
Es muy peligroso dejarte el cepillo alisador encendido, así que, si alguna vez te depistas y no te acuerdas de apagarlo, si cuenta con la función de apagado automático, se apaga por sí solo al cabo de unos minutos.
Material de las púas
Los cepillos alisadores se comercializan con púas plásticas, púas metálicas o púas de piel de cerdo. Los modelos más habituales incorporan púas de plástico que son adecuadas para casi todos los tipos de pelo. No obstante, si tienes pelo grueso o tu pelo suele enredarse con relativa facilidad, quizá te resulten más útiles las púas metálicas que son ideales para tratar enredos.
Eso sí, si tienes el pelo muy fino o tu pelo es muy frágil y se rompe con mucha facilidad, no lo dudes e invierte en un cepillo con púas de piel de cerdo porque aunque es un poco más caro, es el más respetuoso con el cabello.
Longitud del cable
La mayor o menor longitud del cable depende básicamente de dónde vayas a utilizar el cepillo alisador.
- Si casi siempre estás en casa y tienes controlados los enchufes de tu baño, seguramente no necesites una longitud superior a 1 metro. Si además cuenta con cable giratorio 360º mucho mejor, ya que el manejo será mucho más cómodo.
- Sin embargo, si sueles viajar mucho y pasar tiempo fuera de casa, nunca sabes dónde vas a tener un enchufe, así que quizá sea más interesante apostar por un cepillo alisador con un cable de dos o más metros de largo.
Velocidad de calentamiento
Con el cepillo adelantas muchísimo tiempo a la hora de alisar el pelo en comparación con las planchas.
Claro que también depende del tiempo que tarden en calentarse las cerdas. Los modelos más nuevos del mercado suelen andar por los 30-45 segundos.
Función ionizadora
Es una función realmente útil para evitar el encrespamiento. Como ya hemos comentado anteriormente, al secarnos el pelo con una toalla, eliminamos los iones negativos del pelo de forma que solo quedan los iones positivos que hacen que los pelos se repelan entre sí provocando el tan odiado encrespamiento.
Para evitar esto, muchos cepillos alisadores incorporan una función ionizadora que inyecta iones negativos en el cabello para restaurar el equilibrio de los que son positivos y negativos y ofrecer una melena con un alisado profesional.
Accesorios
Algunos modelos cuentan con diferentes cabezales para adaptarse a cada tipo de pelo, guantes para proteger las manos o pinzas para sujetar el pelo. Muchos modelos también incluyen una funda de viaje para que puedas llevarlo contigo a todas partes.
Ventajas de utilizar un cepillo alisador
- El cepillo alisador de pelo es conveniente para mujeres a las que no les guste llevar el cabello demasiado aplastado. A diferencia de las planchas de pelo que son recomendables para cabellos gruesos y rizados difíciles de alisar, el cepillo alisador es muy recomendable para cabellos finos y sin cuerpo, ya que además de alisar el pelo también le confiere bastante volumen.
- Utilizan una temperatura más baja que las tradicionales planchas de alisado por lo que son más respetuosos con el cabello y evitan daños a consecuencia de un calor excesivo. Con un cepillo alisador el calor no se acumula en una zona concreta, sino que se reparte homogéneamente por todo el cabello. Además, el pelo está expuesto al calor durante menos tiempo, a diferencia de las placas de alisado que conllevan un estrés térmico considerable para el cabello.
- Son muy fáciles de utilizar y ofrecen buenos resultados en muy poco tiempo. Aunque el alisado para pelos gruesos y rizados quizá no es tan profesional como el que se obtiene con las planchas de alisado o el método tradicional de cepillo y secador, es perfecto para repasar el pelo cada día sin someterlo a un calor excesivo. En todo caso, si compras un modelo de calidad y de una marca conocida, estamos seguros de que cumplirá su cometido a la perfección.
- Alisa el pelo en tan solo 15 o 20 minutos, lo que nos permitirá ahorrar mucho tiempo en comparación con las clásicas planchas de pelo que, por lo general, necesitan al menos 45 minutos para conseguir un alisado perfecto en una melena larga. Por eso mismo, es la alternativa ideal para mujeres que no cuentan con mucho tiempo en su rutina diaria de belleza.
- Se puede elegir la temperatura más adecuada en función del tipo de pelo con lo que se evita exponer el cabello a un calor excesivo.
- Es una buena alternativa a las planchas de alisado, especialmente si se viaja mucho, ya que ocupa menos y es mucho más ligero que las tradicionales planchas de cerámica.
Recomendaciones de uso
- A pesar de que han salido al mercado modelos que permiten utilizarlo con el pelo húmedo, es recomendable desenredar y secar el pelo bien antes de utilizarlo. Así, evitarás tener que pegar tirones que podrían romper el pelo y quebrarlo durante el alisado.
- Aunque la temperatura del cepillo alisador no es extremadamente alta, es recomendable utilizar un protector térmico para proteger el pelo antes de su uso. Encontrarás lociones protectoras tanto en forma de crema como en forma de gel, pero sí es aconsejable que lo extiendas bien por el pelo incluyendo la puntas antes de comenzar con tu rutina de alisado.
- Selecciona una temperatura adecuada para tu tipo de pelo. Por lo general, los cepillos alisadores tienen una pantalla digital en la que podrás ajustar niveles de temperatura diferente dependiendo de si tienes el pelo liso, normal o grueso.
- Una vez que las cerdas se hayan calentado lo suficiente, divide tu cabello en pequeñas partes y desliza suavemente el cepillo como si te estuvieras peinando. Por lo general, con una segunda pasada debería ser suficiente, pero si observas que el pelo sigue sin estar lo suficientemente liso, sube un poco la temperatura y vuelve a pasarlo por todo el cabello.
- Para finalizar, da unas cuantas pasadas más a todo el cabello para reafirmar el alisado y peínate como más te guste.
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